Nueva York con poco presupuesto
¿Es posible visitar Nueva York con poco presupuesto?
Sin duda alguna, Nueva York es la ciudad más icónica de Estados Unidos. Su continua exposición al mundo – cine, publicidad…- hace que una gran parte de los habitantes del mundo quieran pisar sus calles, al menos una vez en la vida. ¿Cuál es el problema? El dinero. Nueva York es una ciudad cara, en parte por esa continua presencia en nuestras vidas. Sin embargo, no tenéis de qué preocuparos: a continuación, os daremos siete pautas para poder visitar Nueva York con poco presupuesto.
Planea tu presupuesto antes de viajar
Este es el pilar de todo viaje y condicionará todo lo que venga después, así que presta mucha atención. Si dispones de poco presupuesto para visitar Nueva York – somos estudiantes, así que este sería nuestro caso -, tienes que tener claro que hay restaurantes a los que no debes ir, hoteles donde no puedes hospedarte y lugares que se quedarán sin visitar. Tendrás que hacer sacrificios, pero será vital si quieres sobrevivir a una semana en la ciudad. Lo ideal es marcar una cantidad máxima de gasto por día, dejando aparte el alojamiento. Imprescindible será respetarla.
Si vas, que sea en verano
No, no vas a encontrarte la ciudad vacía, pero su clima caluroso y húmedo – además de las tormentas ocasionales – provoca que los habitantes de la ciudad prefieran estar en casa, por lo que el tráfico de peatones habrá disminuido. Además de esto, los restaurantes suelen tener ofertas estivales para los visitantes, por lo que podemos conseguir un gran ahorro inviable el resto del año.
También es aconsejable visitar la ciudad entre semana, ya que las tarifas son más baratas en general y no vas a encontrar tanta gente en la calle. Los días laborables son ideales para pasear por Nueva York.
Reserva con antelación
Cuando tienes poco presupuesto en Nueva York es vital reservar con antelación. Requerirá de cierta paciencia, pero es vital que busquemos tarifas baratas a través de Internet. Especialmente económicas resultan las habitaciones de albergues y hostales, aunque debes estar rápido para reservar estos alojamientos ya que precisamente por su precio, se agotan antes. Una pista: los mejores precios se encuentran en Manhattan.
Usa el transporte público
Si puedes ir a pie, mejor. Pero si eres de esos a los que las distancias se les hacen largas, te interesa adquirir una Metrocard que cubra gran parte de los viajes que vayas a realizar durante tu estancia y que debes calcular de antemano. Si tienes problemas para orientarte y encontrar las estaciones, es recomendable una buena tarifa de datos en tu móvil y tirar de mapa, cosa que aunque no lo parezca, te ahorrará un buen dinero. Otra opción es tomar el taxi, aunque tu bolsillo no podrá resistir tomar, por ejemplo, dos por día.
Busca las atracciones gratuitas
Afortunadamente, Nueva York goza de buena salud económica, lo que permite que sus museos y monumentos se sustenten a través de donaciones. Eso genera que haya una gran cantidad de espacios de interés que sean de libre acceso: Times Square, Central Park, Rockefeller Center…
Además, muchos museos siguen la fórmula de “la voluntad”; es decir, que cada cual pague lo que pueda o estime oportuno. El Museo de Historia Natural, el MoMA o el Museo de Queens siguen esta fórmula, por lo que los podrás visitar de forma gratuita o por un precio muy bajo.
Controla la comida
Pasarás por la Gran Manzana y querrás entrar en todos los lujosos restaurantes que copan la zona. Pero no: debes controlarte, recuerda que estás en Nueva York con poco presupuesto. Procura comprar comida en alguna pequeña tienda cerca de donde te hospedes y llévala contigo. De esta forma, no gastarás más allá de $10 en comer.
Afortunadamente, si eres más exquisito y no quieres comer envasado durante toda tu estancia, en verano puedes aprovechar la conocida Semana de los Restaurantes. Durante la misma, los establecimientos ofrecen almuerzos y cenas a mitad de precio, por lo que podremos visitar restaurantes habitualmente inaccesibles.
También hay que estar muy atento a las “horas felices” que muchos bares y pubs ofrecen, ya que ofrecen todo tipo de bebidas a precio reducido durante un tiempo limitado. Los horarios suelen estar anunciados en las puertas de dichos establecimientos, por lo que tenemos que tener los ojos bien abiertos.
Si te apetece mucho ir a algún restaurante márcalo con una fecha especial, reserva y disfrútalo, ¡Estás en Nueva York!
Cuidado con las compras
Aunque Nueva York no establece impuestos sobre prendas por debajo de $110, las tiendas de la zona suelen ser caras, por lo que debes estar atento a dónde entras cuando vayas a comprar no solo ropa, sino también artículos de recuerdo. Debes estar muy atento a los cupones descuento que se reparten muy a menudo en las tiendas y no dejarte engañar por los vendedores callejeros o de puestos de recuerdos. Si no tienen los precios debidamente etiquetados, no entres; puede que intenten cobrarte por encima del valor real.
Si eres estudiante y no tienes mucho presupuesto lo ideal para poder viajar a Nueva York es realizar un programa Work and Travel. Podrás trabajar tres meses en Estados Unidos y después tendrás un mes extra de visado para viajar, habrás ganado dinero por lo que podrás ir a Nueva York y disfrutar de la experiencia de este viaje sin sufrir por la economía.
¿Qué requisitos hay que cumplir?
- Tener entre 18 y 28 años
- Ser estudiante de una entidad de educación superior
- Tener un nivel medio de inglés
- Disponibilidad desde mediados de junio hasta finales de septiembre
Si estás interesado puedes ver más información en Work and Travel y si tienes alguna duda puedes ponerte en contacto con nosotros rellenando el formulario y estaremos encantados de ayudarte.
Si por el contrario no cumples con todos los requisitos exigidos para realizar este programa no te preocupes pues como hemos explicado en las líneas anteriores, programando el viaje con anticipación puedes beneficiarte de numerosos descuentos en vuelos y hoteles de la ciudad de Nueva York.